Sucede que me encuentro con preguntas sobre la dirección de mi vida: ¿Sé lo que quiero? ¿Voy en la dirección correcta? ¿Voy tras la mejor versión de mí misma?
Plan a cinco años. Lo pensé. Cerré el libro. Lo volví a abrir. Las preguntas difíciles hay que enfrentarlas, que no quiere decir que haya que contestarlas.
Así que ¿cómo me veo en cinco años? Lo primero que pienso es que "ojalá pueda verme todavía en cinco años". La vida es impredecible. Luego entonces, ¿plan?
Y me puse a navegar buscando ayuda. Hay por ahí formatos para armar el plan, también puedes encontrar infogramas que te dicen con toda certeza: ¿quieres ser feliz?, entonces comprométete con un plan en lugar de hacerlo con una persona o con una cosa. Y me pregunto, ¿de qué se puede componer un plan que no tiene adentro ni personas ni cosas? La promesa del plan es ganar más dinero (¿para qué si no quieres cosas?), calificarse de exitoso por lograr metas, ser poderoso, apreciado (¿por quién sin no estás pensando en gente?). Creo que algo está mal en el planteamiento y algo está muy mal en llevarnos a definirnos conforme a un plan que, de acuerdo con los formatos, tiene que ser específico.
A ver, si hoy se me antoja un helado porque hace muchísimo calor y no he comido y me trazo un plan para conseguir el helado mañana, digamos, y si mañana me invitan a comer y hace frío y ya no quiero el helado, ¿de qué sirve el plan sino para consumir tiempo (privarme de otras experiencias)?
La vida te cambia la jugada a cada rato, es decir, las circunstancias cambian y uno es conforme a las circunstancias.
Los formatos te piden que llenes: en quién te quieres convertir, qué quieres aprender, qué quieres lograr, qué quieres crear, qué quieres construir, qué quieres dar, qué quieres comprar, qué quieres visitar, a dónde quieres viajar. Al final llenas, quién sabe cómo lo siguiente: Auto-desarrollo, Espiritualidad, Salud y Deporte. Todo lo que puedas llenar hoy, es lo que quieres hoy, mañana quién sabe.
Entiendo que hay cosas que no se consiguen de un día para otro, como conseguir un título universitario. Eso bien te puede llevar al menos cinco años. Pongamos que quieres eso. En qué se convierte el plan a cinco años sino en hacer lo necesario para entrar a la universidad y luego cumplir los requisitos para conseguir el título que ahora mismo desconoces como para planear cómo y cuándo los harás.
Pensemos en que quieres correr un maratón. El plan depende de en dónde te encuentres ahora. No es lo mismo correr un maratón si ya corres todos los días y has cubierto distancias de 15 km a si sólo has corrido para alcanzar el camión. En todos los formatos no veo que te pregunten, ¿dónde estás ahora?
Todos quieren lanzarse a conseguir cosas sin tener idea de quiénes son y con qué cuentan. La gente está muy preocupada por su futuro y no piensa en su presente. Así, la felicidad es una promesa que nunca llega porque siempre tendrás la vista en las cosas que te faltan, en lo por conseguir.
La mayor parte de la gente considera que el ver "hacia adelante" es lo que mantiene vivo al hombre, la puesta en la mira de metas, el tirarse hacia una hipotética zanahoria que siempre está "allá adelante". Vivimos por y hacia una proyección.
Por ahí leí algo así como que la vida es lo que sucede mientras haces planes. También leí que la vida son momentos (y los momentos no son eternos ni están garantizados).
Puedes trazar una guía para conseguir algo específico, como aprender algún tema en particular. Pero eso no es un plan de vida. Aprender algo formará parte de la vida que tienes ahora. Y en el transcurso puedes cambiar de opinión. ¿Es imperioso saber hacia dónde vas? Te contesto, hacia la muerte y en medio de eso las posibilidades son infinitas. La cuestión fundamental está en saber qué te gusta, qué causa suficiente curiosidad en ti como para enfocarte en ello. Pero generalmente lo que causa curiosidad no figura en los planes famosos.
Por ahí (TEDx) hay unos videos lúcidos al respecto de David Evans y Bill Burnett bajo el título Designing Your Life. Pero el propósito detrás de ello no es conseguir algo lejos que está en el futuro sino hacer de la vida una experiencia con significado.
El meollo del asunto es que el significado de la vida depende en gran medida de cuáles son tus creencias pues ellas perfilan la manera en que te ves a ti y a lo que haces. El meollo es si uno se cree que es "más" si hace tal o cual, o si cree que si consigue x o y su vida tendrá significado y que si no lo logra su vida sería literalmente una basura. A esto se le llama sesgo cognitivo y es la causa de ansiedad y depresión, es la causa de violencia hacia otros y hacia ti, es la causa de nuestra incapacidad para ver al otro (los seres con los que compartimos la vida, que son muchísimos más de los que te puedas imaginar).
Uno de los problemas de la humanidad es que está muy ocupada consiguiendo cosas para sentirse mejor y en ese ir en pos, pasa por encima de quien sea y lo que sea. Uno de los problemas de la humanidad es cubrir las carencias de sí bajo el disfraz de la búsqueda de lo espiritual (que en realidad, cada vez que lo pienso menos sé qué es eso en realidad). El gran problema es el montón de creencias que dan forma a la interpretación de nuestra vida.
La vida es lo que nos sucede ahora, nuestra plenitud depende de cómo interpretamos lo que nos sucede.
Por mucho tiempo hemos creído que tenemos el control en nuestras manos y que podemos hacer lo que nos venga en gana y que eso es ser poderoso, exitoso, emprendedor, etc. A esa forma de ser es a la que le hemos dado valor y por naturaleza perseguimos sólo lo que consideramos valioso.
¿Plan de vida?
¿Se puede pensar el trazado de una constelación antes de que nazcan las estrellas?
Plan a cinco años. Lo pensé. Cerré el libro. Lo volví a abrir. Las preguntas difíciles hay que enfrentarlas, que no quiere decir que haya que contestarlas.
Así que ¿cómo me veo en cinco años? Lo primero que pienso es que "ojalá pueda verme todavía en cinco años". La vida es impredecible. Luego entonces, ¿plan?
Y me puse a navegar buscando ayuda. Hay por ahí formatos para armar el plan, también puedes encontrar infogramas que te dicen con toda certeza: ¿quieres ser feliz?, entonces comprométete con un plan en lugar de hacerlo con una persona o con una cosa. Y me pregunto, ¿de qué se puede componer un plan que no tiene adentro ni personas ni cosas? La promesa del plan es ganar más dinero (¿para qué si no quieres cosas?), calificarse de exitoso por lograr metas, ser poderoso, apreciado (¿por quién sin no estás pensando en gente?). Creo que algo está mal en el planteamiento y algo está muy mal en llevarnos a definirnos conforme a un plan que, de acuerdo con los formatos, tiene que ser específico.
A ver, si hoy se me antoja un helado porque hace muchísimo calor y no he comido y me trazo un plan para conseguir el helado mañana, digamos, y si mañana me invitan a comer y hace frío y ya no quiero el helado, ¿de qué sirve el plan sino para consumir tiempo (privarme de otras experiencias)?
La vida te cambia la jugada a cada rato, es decir, las circunstancias cambian y uno es conforme a las circunstancias.
Los formatos te piden que llenes: en quién te quieres convertir, qué quieres aprender, qué quieres lograr, qué quieres crear, qué quieres construir, qué quieres dar, qué quieres comprar, qué quieres visitar, a dónde quieres viajar. Al final llenas, quién sabe cómo lo siguiente: Auto-desarrollo, Espiritualidad, Salud y Deporte. Todo lo que puedas llenar hoy, es lo que quieres hoy, mañana quién sabe.
Entiendo que hay cosas que no se consiguen de un día para otro, como conseguir un título universitario. Eso bien te puede llevar al menos cinco años. Pongamos que quieres eso. En qué se convierte el plan a cinco años sino en hacer lo necesario para entrar a la universidad y luego cumplir los requisitos para conseguir el título que ahora mismo desconoces como para planear cómo y cuándo los harás.
Pensemos en que quieres correr un maratón. El plan depende de en dónde te encuentres ahora. No es lo mismo correr un maratón si ya corres todos los días y has cubierto distancias de 15 km a si sólo has corrido para alcanzar el camión. En todos los formatos no veo que te pregunten, ¿dónde estás ahora?
Todos quieren lanzarse a conseguir cosas sin tener idea de quiénes son y con qué cuentan. La gente está muy preocupada por su futuro y no piensa en su presente. Así, la felicidad es una promesa que nunca llega porque siempre tendrás la vista en las cosas que te faltan, en lo por conseguir.
La mayor parte de la gente considera que el ver "hacia adelante" es lo que mantiene vivo al hombre, la puesta en la mira de metas, el tirarse hacia una hipotética zanahoria que siempre está "allá adelante". Vivimos por y hacia una proyección.
Por ahí leí algo así como que la vida es lo que sucede mientras haces planes. También leí que la vida son momentos (y los momentos no son eternos ni están garantizados).
Puedes trazar una guía para conseguir algo específico, como aprender algún tema en particular. Pero eso no es un plan de vida. Aprender algo formará parte de la vida que tienes ahora. Y en el transcurso puedes cambiar de opinión. ¿Es imperioso saber hacia dónde vas? Te contesto, hacia la muerte y en medio de eso las posibilidades son infinitas. La cuestión fundamental está en saber qué te gusta, qué causa suficiente curiosidad en ti como para enfocarte en ello. Pero generalmente lo que causa curiosidad no figura en los planes famosos.
Por ahí (TEDx) hay unos videos lúcidos al respecto de David Evans y Bill Burnett bajo el título Designing Your Life. Pero el propósito detrás de ello no es conseguir algo lejos que está en el futuro sino hacer de la vida una experiencia con significado.
El meollo del asunto es que el significado de la vida depende en gran medida de cuáles son tus creencias pues ellas perfilan la manera en que te ves a ti y a lo que haces. El meollo es si uno se cree que es "más" si hace tal o cual, o si cree que si consigue x o y su vida tendrá significado y que si no lo logra su vida sería literalmente una basura. A esto se le llama sesgo cognitivo y es la causa de ansiedad y depresión, es la causa de violencia hacia otros y hacia ti, es la causa de nuestra incapacidad para ver al otro (los seres con los que compartimos la vida, que son muchísimos más de los que te puedas imaginar).
Uno de los problemas de la humanidad es que está muy ocupada consiguiendo cosas para sentirse mejor y en ese ir en pos, pasa por encima de quien sea y lo que sea. Uno de los problemas de la humanidad es cubrir las carencias de sí bajo el disfraz de la búsqueda de lo espiritual (que en realidad, cada vez que lo pienso menos sé qué es eso en realidad). El gran problema es el montón de creencias que dan forma a la interpretación de nuestra vida.
La vida es lo que nos sucede ahora, nuestra plenitud depende de cómo interpretamos lo que nos sucede.
Por mucho tiempo hemos creído que tenemos el control en nuestras manos y que podemos hacer lo que nos venga en gana y que eso es ser poderoso, exitoso, emprendedor, etc. A esa forma de ser es a la que le hemos dado valor y por naturaleza perseguimos sólo lo que consideramos valioso.
¿Plan de vida?
¿Se puede pensar el trazado de una constelación antes de que nazcan las estrellas?
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