Voy camino a los cincuenta, cada vez se sienten más cerca, más alcanzables. Hoy me encuentro menos temerosa y más dispuesta a recibirlos. Durante mi desayuno, luego de regar mi breve jardín, me encuentro navegando entre videos buscando inspiración. Entonces, llega el regalo, el extracto (IV) del poema Vacillation de William Butler Yeats: IV My fiftieth year had come and gone, I sat, a solitary man, In a crowded London shop, An open book and empty cup On the marble table-top. While on the shop and street I gazed My body of a sudden blazed; And twenty minutes more or less It seemed, so great my happiness, That I was blessed and could bless. I V (mi traducción) Mi cincuenta aniversario ha llegado y pasado, Me senté, hombre solitario, En una concurrida tienda londinese, Un libro abierto y una taza vacía sobre el marmol de la mesa. Mientras miraba sin ver tienda y calle Mi cuerpo de pronto se encendió; Por veinte minutos más o menos Parecía, tan grande era mi
"A soul in tension that's learning to fly" —Pink Floyd