No hay respuestas pero no estás solo

Hoy quiero escribirles no porque tenga LA respuesta última sino porque no tengo ninguna. Y creo que eso puede ayudar a alguien que, como yo, esté buscando respuestas.

No hay respuestas.

Pero no tengan miedo de que la vida les parezca incierta; para que cada uno de nosotros pueda vivir su particular vida, nada dentro de la existencia puede estar dado. Somos existencia libre en su fundamento abisal.

Queremos, sin embargo, librarnos de todo mal. Queremos saber, queremos anticiparnos y prevenir. Tenemos miedo y a ese miedo nos ha dado por llamarle voluntad.

El otro día estaba leyendo algo en torno al peligro del mindfulness. El peligro radica en la voluntad. Quieres practicar mindfulness para sentirte TU bien, lo demás no importa. Quieres quitarte el malestar sí o sí. Aquello de lo cual partió el mindfulness (la compasión) es olvidado. A mí no se me había ocurrido que darte cuenta de tu sufrimiento, asistir y observar la experiencia, buscaba fundamentalmente la comprensión del sufrimiento de los otros, el deseo de que el mundo se liberara del sufrimiento. El voto budista era por liberar a todos los seres sintientes, nunca buscaba la liberación personal y a otra cosa mariposa.

Que yo haya experimentado el sufrimiento, me hace más compasiva (amorosamente comprensiva) ante aquel que lo experimenta. También, en la experiencia del sufrimiento, vivo la humildad. Aceptar que no puedes solo, es para muchos de nosotros una experiencia fuerte.

Somos seres existentes con memoria. A veces eso es una bendición, otras una tortura. La memoria es corporal, emocional y mental, en todo ese espectro se mueve. También sucede que una esfera se contrapone a otra, y sucede de manera común pero a veces las contraposiciones son fuertes. Ten paciencia y respétate cuando esto sucede.

Sé que la paciencia no es precisamente lo que tienes en mente cuando te sientes mal. Quieres respuestas, soluciones. No tengo ninguna para ti. No estás solo. Esto va pasar aunque estés seguro de que no es así. Cuando pase, no te montes en la soberbia y comprende a quien no ve salida cuando se cruce por tu camino.

A mí me ha ayudado mucho cuando me han dicho que no tengo por qué se feliz todo el tiempo, que no tengo porqué buscarle la razón, que rendirse a lo que eres-experimentas no tiene nada de malo. Pero igual a ti te ayuda otra cosa, inténtalo . No te preocupes si como las épocas de año, vuelve tu sufrimiento, con todo el amor hacia ti abraza lo que eres porque es lo único que tienes en realidad.

La compasión no desaparece tu sufrimiento pero ayuda a atenuar el del otro.