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Sincronicidad

El azar no es más que el nombre que se le da a una ley no conocida.
El Kybalion

El tema llega a mi recurrentemente. Un libro, sucesos; lo olvido... de pronto ahí está de nueva cuenta, la sincronicidad asomándose a mi vida.

  • Tengo un deseo, pienso en él mientras medito y al acabar mi celular se enciende mostrándome lo que estoy buscando.
  • Me subo a un camión, me llaman la atención una madre con su hija de una manera peculiar; no es que hablen de algo interesante o estén haciendo algo en particular, ni siquiera visten de modo llamativo pero mis ojos se posan en ellas. Bajo del camión, por tres horas realizo varias actividades. De regreso un camión espera a que fluya el tráfico, me da tiempo de llegar hasta él, verificar a dónde va y subirme. Decido bajarme antes, nunca lo he hecho, se paran dos mujeres y me asombra ver a la madre e hija que tanto me habían llamado la atención; bajamos en el mismo lugar, caminamos hacia la misma dirección.
  • Después de años de no ver a una persona, de vivir en países distintos y no tener contacto alguno, un día nos cruzamos, ¿qué probabilidades hay? Después del encuentro algo se ha movido dentro de mí, no me siento igual. No entiendo mi movimiento interno, es sólo alguien que conocí alguna vez ya ya.
  • Me gusta correr, no tengo un horario ni lugar fijo. Corro a la hora que siento el deseo y en el lugar que me llama. En la Ciudad de México, ¿qué probabilidades hay de que me encuentre a alguien que no quiero ver, cuando hay veces que con cita y queriendo no encuentras a la persona aunque esté diez pasos lejos de ti?
  • Quiero cambiar la fecha de una cita pero no quiero molestar a la otra persona, de pronto me llama esa persona para cambiar la fecha.
  • Pienso en alguien y suena el teléfono, es la persona en la que estoy pensando.
Lo interesante de estos eventos es que lo observado se liga al observador de manera significativa no de una manera reflexiva sino, me parece, instantáneamente. El observador recibe el impacto que sólo tiene sentido para él en la forma de sincronicidad.

Miles de cosas pasan todos los días a cada instante y la mayor parte del tiempo lo único que llegamos a percibir es nuestro propio ruido mental. Lo significativo de la sincronicidad es que te saca del ensimismamiento.

¿Quién se comunica en un evento así, el universo o el observador (o mejor dicho el ser dentro de mí, the self in myself)?

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