Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2013

Los favoritos de la existencia

Uno viene a la vida y empieza a acumular, entre muchas otras cosas, los favoritos de la existencia. Dependiendo del momento en que le pregunten a uno: ¿qué es lo que más te gusta de la vida?, es que aparecerá una  de esas cosas que hacen que la vida sea vida. En la lista de mis favoritos de la existencia están, sin un orden en especial: la comida/bebida, la música, el aire, el sol. Hay otras cosas pero son más difíciles de conseguir y, además, creo que si en algún momento no disfruto estos cuatro favoritos (en el tipo particular que me gustan), es que realmente me encuentro muy muy mal. Y digo "creo" porque hasta el momento no he dejado de disfrutar mis favoritos, ni estando enferma dejo de disfrutar la comida, por ejemplo. Mis favoritos de la existencia me sostienen cuando la cosa va muy mal, son como alimento/medicina del alma, me hacen creer que Dios existe.

TV

I see the TV and there is she. She is seing the TV, she is sad but, as always, she finds the way to put herself together and continue with her life, no the sad life, her amazing life. Why am I writing in English? I do not know, the words just come to me.  I just decide to be a fiction character, I am watching the TV and it will be enought to me in order to become strong and continue with my amazing life. 

Usada

Cuando he usado mucho las manos, tomando cualquier cosa, lavando sin guantes, mis uñas quedan horribles y, sin embargo, siempre puedo arreglarlas: corto las uñas, corto las cutículas, froto mis manos con azúcar y aceite, pulo mis uñas, esmalte, humectante, listo. Mi vida, a esa, no le puedo hacer nada. No la puedo pulir, no hay esmalte que cubra lo que no quiero ver. Mi vida está aquí toda usada, toda imperfecta, con filos que me raspan, con cortadas que arden, con errores... Y no hay otra forma de llevar la vida, no hay guantes que la cubran ni posibilidad de no usarla.  La vida no se lava ni se guarda en una vitrina para sólo mirarla.  Por algún lugar escuché algo así como que Heidegger quería decir Meaning en lugar de Being . Hoy, en un curso on line , escuché que para Wittgenstein Meaning era, en todo caso, Using .  El ser es uso , me queda claro. Tengo que lidiar con ello. 

Durante una sesión de TV dominical

Y llega el punto en el que uno se cansa de hacer lo correcto para darle paso a lo que uno desea. Por ejemplo justo ahora que mentalmente me debato sobre escribir lo correcto, en replantear el deseo como deseo de hacer lo correcto... Bien, es imposible que un ser humano consciente deje de pensar, de modo que para mí resulta antinatural dejar de cuestionar-me. Y llega un punto en el que por un instante dejo de hacerlo y justo instantes después inicio una serie de justificaciones sobre mis decisiones. Así, la cosa: unos evaden, yo analizo y cuestiono.  Me he sentado a ver la televisión desde la mañana con un libro al lado para evitar remordimientos. El libro es bastante tentador pero no lo he abierto. Me gusta lo que está en la tele porque conecta ahora conmigo (bueno estoy escribiendo esto en un replay para continuar en el mismo ambiance ). Veo una cafetería, me encantan las cafeterías, gente desconocida te acompaña sin necesidad de hablarles, bebidas con aromas muy gratos, co

Cambio, ¿ahora?

Muchos repetimos como loros, es decir, de dientes para afuera, que el cambio comienza ahora. Todos sabemos que la muerte es una certeza a la vuelta de la esquina y seguimos haciendo de todo por evitar que semejante certeza nos deje con una conciencia al borde del abismo. Muchos nos damos a la tarea de encadenar correos electrónicos, reenviamos lo que nos llega como si re-vomitáramos una idea bastante manoseada. Y, si alguno lee a conciencia lo que reenvía, al poco rato lo olvida, y si lo recuerda será como quien repite un refrán sin hacer experiencia de ello. Nos gusta el ritmo del sonsonete que nos adormece y nos aparta de lo que no queremos ver.  Queremos cambiar a cierto estado y no hacemos nada que resulte efectivo, tan sólo esperamos a que llegue el fin de año  para escribir la lista de propósitos con la misma intención que uno ve un partido de fútbol. 

De observadora

Mientras espero, una espera larga, estoy de mirona. Miro aquí, miro allá. Un zapateado me llama la atención y me pregunto ¿por qué tres soldaditos juegan con sus rifles todos lindos, y a pierna alzada en sincronía cambian de lugar, dándole vueltas y vueltas a los rifles? ¿Qué razón poderosa los tiene haciendo la rutina una y otra vez? ¿Qué resguardan? ¿A quién le dedican semejante rito? Utilidad claramente se ve que no hay, y placer, francamente, después de la tercer repetición, no creo que les dé. Quizá están para mí. Nadie más les mira. Nadie más les escucha.  Soy la nueva conocida por acá. La conocida de sólo un día. Un policía se acerca a hacerme confidencias y a desahogarse de los contras de su trabajo   Me explica. Le escucho. Los soldaditos siguen en lo suyo (aunque no sé si en realidad "eso" es lo suyo). Lo mío es escribir y mirar (afuera y adentro).  Siempre me pregunto, cuando veo a alguien en una situación difícil o incómoda, ¿y si quieren ir al baño,

Autoterapia o pensando en voz alta

Parece ser que sólo hasta que mi estado emocional ha recuperado cierta calma, es que puedo darme cuenta de cómo mis reacciones actuales reflejan las heridas (o los aprendizajes) y las heridas sobre las heridas (o los reforzamientos del aprendizaje). Se te cae el helado al punto que le vas a dar el primer lengüetazo. Al siguiente helado tomas cierta precaución, es inevitable (por eso aprendemos), y si se vuelve a repetir la experiencia, tus decisiones respecto a si vuelves a intentarlo o cómo lo intentas reflejaran sin lugar a duda tu experiencia. Si sabes sobreponerte a la frustración, lo volverás a intentar; si reflexionas sobre los hechos, modificarás tus acciones para ensayar una nueva aproximación; si tu deseo es superior a tus malas experiencias, es posible que experimentes dolor ya sea que lo vuelvas a intentar o no porque todo cuanto deseas profundamente marca mucho más tu personalidad y esos deseos son tratados en calidad de místicos pues no los puedes explicar, simplemen